La visión

MIOPÍA

Por lo general en la miopía el ojo es un poco mayor de lo normal, lo que hace que las imágenes no lleguen a la retina (la película) y se vean desenfocadas. Esto hace que el miope vea mal de lejos pero pueda ver bien de cerca, por lo que se les llama también “cortos de vista”.

La miopía suele aparecer en la adolescencia y va aumentando progresivamente, no pudiendo ir a menos al ser su causa un aumento del tamaño del ojo. Al completar el crecimiento, hacia los 18 o 20 años de edad, se suele estabilizar, siendo el momento en que se puede plantear una solución quirúrgica para la misma.

En raras ocasiones puede también aparecer antes y después de estas edades y asimismo no detenerse su progresión e ir aumentando paulatinamente.


  1. Corrección clásica
  2. Corrección quirúrgica por láser
HIPERMETROPÍA

El ojo suele ser algo más pequeño y las imágenes se enfocan más allá de la retina. Esta situación tiene una ventaja y es que la lente natural del ojo, el cristalino, haciendo un esfuerzo de enfoque puede compensar el defecto y de esta manera el hipermétrope vé bien.

Esta compensación hace que en este defecto se vea mejor de lejos que de cerca por lo que se les llama largos de vista.

Se suele nacer con la hipermetropía, siendo un defecto muy frecuente en la infancia. Asimismo a estas edades el esfuerzo de compensación se acompaña de un mal funcionamiento de los músculos del ojo originando un estrabismo. Dicho esfuerzo, y a cualquier edad, se acompaña de fatiga visual, desenfoques y dolores de cabeza.

Por lo general el hipermétrope funciona bien y sin gafas durante muchos años, pero a partir de los 35-40 años de edad la compensación de enfoque se hace peor y se manifiesta progresivamente el defecto.


  1. Corrección clásica
  2. Corrección quirúrgica por láser
ASTIGMATISMO

Es un defecto de graduación que mayoritariamente se produce en la córnea, que es la ventana del ojo y su primera lente. Esta lente debe ser parecida a una esfera, a un balón de fútbol, pero en el astigmatismo se ovaliza y queda como un balón de rugby. Esto hace que las imágenes lleguen partidas a la retina enfocándose en distintos planos, lo que hace que dependiendo del tipo de astigmatismo se vea mal en todas las distancias o en algunas.

Se nace con esta forma oval de la córnea, por lo que el astigmatismo prácticamente no varía a lo largo de la vida. Asimismo puede ser parcialmente compensado por un esfuerzo de enfoque del cristalino, el cual puede también producir fatiga visual, desenfoques y dolores de cabeza.


  1. Corrección clásica
  2. Corrección quirúrgica por láser
PRESBICIA
VISTA CANSADA

El ojo, al igual que las cámaras de video y fotografía con su sistema de “autofocus”, dispone en su interior de una lente natural, el cristalino, que realiza de manera automática un enfoque de la visión para poder ver a cualquier distancia con nitidez. A partir de los 35-45 años de edad el automatismo empieza a fallar y las imágenes que tenemos que ver de cerca, como son la lectura o la costura, se hacen con dificultad.

El fallo de enfoque de la visión próxima va aumentando progresivamente hasta los 60 años de edad en que se estabiliza en un tope. Hasta entonces, cada dos o tres años hay que ir ajustando la graduación de cerca para un correcto enfoque. Es el defecto de graduación más frecuente que existe ya que de manera inexorable afecta a casi el 100% de la población al llegar a esas edades.

La presbicia se manifiesta por la necesidad de alejar los objetos de lectura, costura, etc., para poder verlos bien. Las letras “bailan”, se producen desenfoques incluso al mirar de lejos, hay más fatiga visual y nos hacemos más dependientes de una buena luz para poder ver los detalles de cerca. Cuando el alejamiento no es suficiente o es incómodo es cuando se empiezan a utilizar gafas de visión próxima.


  1. Corrección quirúrgica

Diseña: RM Informáticos